
ODIO MADRIZ y sus deslenguadas virtudes:
El aullido de los autos a destiempo, sin motivo, enmudecen mis oídos
El olor impregnado en las fachadas de desinfectante se confunde entre los malos humos que surgen de las entrañas del subsuelo con las cascadas de orín que desdibujan los adoquines
Los compulsivos gargajos de los pasajeros y persistentes expectoraciones compungidas de flemas subiendo las escaleras rotas, codazo- bolso- abrigo, esfuerzos hercúleos en vano por alzarse a la cima acarreando la mecedora de un niño, cartera- móvil hurtados
Las sirenas sin cola que me hacen pensar van a la caza de pescar a las víctimas de un trágico accidente de tráfico, inminente o inesperada muerte, probablemente tan sólo tienen prisa por tomarse un café en el bar de turno, mientras otros esperan en la cola del paro, o de la seguridad social, frente a un hospicio clama el rumor de un asador de pollos, uno 8 euros, 10 con tortilla de patata y dos refrescos
Locales fúnebres con maniquíes tuertos, calvos, mancos, abandonados a las miradas indiferentes a todo excepto a su reflejo, obreros que jalean, ofenden, duele a sus propias madres, calles cortadas, edificios vestidos de publicidad para el desfile de navidad, otoño, la semana de oro.. y tras un receso no he podido inspirarme más por culpa de los tóxicos de mi peluquero.. no me quedó otra que REÍR!! paresco un canix_xe
1 comentario:
Qué perraca....
..... anda tonta, si sabes que lo amas!!!!
(co-jo-nu-do)
Y te remitiré a nuestro amigo Gómez de la Serna con una frase que le gusta mucho al mosta:
"El ideal del madrileño es conservar mucho tiempo sin que se caiga, la ceniza del cigarro que se está fumando, consiguiendo así la inmortalidad de lo efímero."
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